La XIV Cata insular de Papa de Gran Canaria se celebró el 1 de septiembre en la Granja Agrícola del Cabildo
Los resultados del ensayo experimental del cultivo de variedades de papa se trasladarán, un año más, a los agricultores
El panel de cata de la XIV Cata Insular de Papa de Gran Canaria, compuesto por 16 miembros, determinó que ‘Soraya’ es la mejor papa de Gran Canaria en la cosecha 2023.
La Granja Agrícola Experimental del Cabildo acogió la sesión a puerta cerrada en la que se probaron, en distintas cocciones, las diez variedades de papas más productivas del “Ensayo de rendimiento de variedades de papa 2023”.
Junto a la mención especial a la Mejor Papa de Gran Canaria, se determinaron las mejores variedades en las categorías de arrugar, sancochar y freír, que recayeron en Picasso, Soraya y Valor respectivamente.
Con la cata anual de papa, la Consejería de Sector Primario, Soberanía Alimentaria y Seguridad Hídrica del Cabildo de Gran Canaria que dirige el consejero Miguel Hidalgo, cumple varios objetivos de su plan estratégico para el sector primario: la valorización del producto y la contribución al avance de su calidad.
Los técnicos de la Consejería de Sector Primario transferirán a los agricultores los resultados del “Ensayo de rendimiento de variedades de papa en sistema convencional y ecológico 2023”, en el que se plantaron y analizaron veintiocho variedades de papas diferentes: diecisiete entre las más rentables de 2022 o de mayor presencia en el mercado insular, junto a otras doce nuevas. Del análisis de distintos parámetros se obtienen datos muy valiosos para los agricultores: productividad, aptitud organoléptica y resistencia a sequías, plagas y enfermedades, etc.
En Gran Canaria se cultivan unas 1.200 hectáreas de papas aproximadamente, en las que se producen 22 millones de kilos para el mercado local.
Esta cantidad productiva cumple con los parámetros recomendados por la FAO para alcanzar la soberanía alimentaria pues entre el 40% y el 42% de las papas que consumimos anualmente han salido de esta tierra.
Papas, historia y tradición
Las papas han constituido una parte importante de la dieta de los canarios y, por supuesto, también de su cultura popular.
Se sabe que ya en 1567 la isla de Gran Canaria, a través del puerto de Las Isletas, servía de puente para la exportación de este producto a Amberes y a Flandes.
Apenas, unos pocos años después de su descubrimiento en el territorio del Imperio Inca, Gran Canaria contribuiría así a la introducción de este fundamental cultivo en Europa.
Los cultivos de papas en Gran Canaria de variedades originales e importadas que ofrecen buenos rendimientos económicos son una referencia para el consumo local. El área de cultivo de la papa insular se sitúa con claridad entre la cota de los 200 metros y la de los 600 metros con ubicaciones en algunos puntos del norte y del noreste que rondan los 800 y hasta los 1.200 metros.
Se trata de entornos agrícolas marcados por condiciones climáticas más o menos húmedas que aprovechan bancales escalonados, terrazas y bocados, con diferentes extensión que desafían a la gravedad, al paso del tiempo y que representan la forma tradicional de cultivar la papa en Gran Canaria.