Entre los productos principales de la propuesta, salmón de Uga, atún rojo canario, pulpo o cherne
Con este formato, que complementa a la carta, el chef Víctor Valverde ofrece el gran fresco de la temporada estival y de su creatividad y compromiso con el territorio
Palacio Ico, el hotel gastronómico de Lanzarote, ha lanzado su nuevo menú-degustación, un formato que irá cambiando a lo largo del año a partir de las distintas estaciones y sus mejores productos.
Este menú, a un precio de 70 euros, complementa a la carta del restaurante e incluye productos como el famoso salmón de Uga, el atún rojo canario, el pulpo o el cherne, entre otros.
El menú-degustación: salmón de Uga, arroz crujiente y mayonesa de chipotle; burrata de Gran Canaria, tapenade de tomates secos de Tinajo y rúcula; tartare de atún, aguacate de La Palma, consomé de jengibre y rabanitos; pulpo al grill, batata blanca y papas de los valles; cherne, crema de millo y verduras de temporada; y mousse de gofio, helado de caramelo salado y merengue.
Sobre el hotel gastronómico Palacio Ico
Construido alrededor de 1690, e incluido por el gran artista César Manrique en su libro “Lanzarote, arquitectura inédita”, es un luminoso ejemplo de la arquitectura señorial canaria. En su interior, son oníricamente sugestivos los grandes artesonados de madera de unos 5 metros de altura, los suelos originales, tanto en madera de morera como de tea del siglo XVIII, los muros de piedra de más de medio metro de ancho y, como gran hit, el patio interior, típicamente canario, al que dan las habitaciones y el restaurante.
Un hotel gastronómico relacionado con el arte desde sus inicios hasta hoy, con sus actuales propietarios, Sonsoles López y Eduardo Riestra.
En la sala del restaurante y en las habitaciones se exponen, entre otros, cuadros de la archiconocida Heidi Bucher, que vivió y creó aquí, del artista Ildefonso Aguilar e imágenes de César Manrique realizadas por el fotógrafo suizo Linus G. Jauslin en los años 70.
Gran parte de las piezas utilizadas en el Palacio Ico provienen de artistas y artesanos de Lanzarote (cerámicas, vajilla, esculturas de Jesús Bonilla, pinturas, fotografías, lámparas…).
Únicamente nueve habitaciones, (cinco suites y cuatro dobles), cada una diferente, llegando algunas hasta los 70 metros cuadrados, diseñadas de forma racional, minimalista y con elementos naturales. Baños amplios en microcemento y piezas volcánicas con la intención de transmitir al conjunto frescura, quietud y sensación de serena melancolía desde la inspiración Wabi Sabi (concepto estético japonés basado en “la belleza de la imperfección”). El desayuno, en comedor, patio central o habitación, es servido en la mesa.
El restaurante se ubica a la entrada de la casona, recibiendo al comensal con una gran vinoteca que da paso al comedor interior o a la terraza del patio central, dependiendo de si desea más intimidad o una experiencia al fresco. También dispone de una pequeña terraza urbana, justo en la entrada, a pie de calle, para sentir la atmósfera sin tiempo de la Villa de Teguise.
El salón-comedor interior, cálido y confortable, exhibe un diseño contemporáneo, maderas y se baña en la elegante luminosidad que penetra por los ventanales que dan a Teguise y los que se arrojan al patio interior.
Con lámparas inspiradas en la obra de Heidi Bucher, la vajilla y toda la cerámica son piezas artesanas y únicas diseñadas por la artista Eguzkine, todo un universo estético que sumerge al comensal en el espíritu de arte, historia y naturaleza, que es el símbolo distintivo de Palacio Ico y de la Villa de Teguise.
En cuanto a la bodega, el restaurante Palacio Ico cuenta con la asesoría de Iván Monreal, grancanario, Segundo Mejor Sumiller del Campeonato Nacional de Sumilleres de España 2021 y con una vertiginosa trayectoria que lo ha llevado a ser jefe sumiller, entre otros, en el Restaurante Amador *** Michelín (Mannheim, Alemania).