La Consejería de Sector Primario del Cabildo de Gran Canaria ha dispuesto 600.000 euros en sus presupuestos de este año para emprender la ejecución de las reformas necesarias para poder reabrir la Bodega Insular, ubicada en San Mateo. Esta instalación pública fue inaugurada en el año 2005 y solamente estuvo en funcionamiento dos años, ya que en 2007 se clausuró por fallos en la impermeabilización, por lo que desde esa fecha se encuentra inoperativa y cerrada.
De la mano del enólogo tinerfeño Juan Jesús Méndez Siverio (Bodegas Viñátigo) se ha diseñado una reforma y un plan de viabilidad a diez años vista que, permitirá procesar un máximo de 60.000 kilos de uva al año, con la posibilidad de aumentar su capacidad en función del número de viticultores que se incorporen al proyecto, la magnitud de las cosechas venideras o la calidad de los vinos que se produzcan en la bodega.
El Cabildo de Gran Canaria tiene la intención de ceder la gestión a productores particulares que carezcan de bodegas propias y a los viticultores de la isla y de esta manera poder dar continuidad a una instalación que por diversos fallos y falta de voluntad política lleva más de una década en desuso pese a las inversiones millonarias hechas para sus fallidas puestas en marcha.
